A través de su cuenta en Twitter, la jefa de Gobierno del Distrito Capital, Jacqueline Faria, anunció que en el mes de marzo serán entregadas 68 viviendas de la primera etapa de Santa Eduviges.

Una nueva vida y un nuevo camino

(Prensa Capital 20Ene10) Con el sonar del martillo, escombros alrededor, vías caídas y obreros demoliendo paredes, los habitantes del sector Santa Ana, ubicado en Antímano, salen de sus viviendas para una nueva vida y para comenzar un nuevo camino.

Así lo expresó Clarissa Caraballo, habitante del sector, quien vivió por más de 40 años en dicha zona. La casa donde vivía Caraballo desde el año 2005 tuvo un declive, las columnas se fracturaron debido al movimiento de tierra a causa de las lluvias.

“Esta casa tiene muchos recuerdos, recuerdos difíciles de olvidar, recuerdos de mi papá, recuerdos de mi mamá, de mis hermanos, porque siempre nos caracterizamos por ser una familia muy unida (…) Esta casa era propiedad de mis padres desde hace más de 40 años y nosotros la heredamos”, dijo Caraballo.

Pero luego de las lluvias la casa de esta venezolana se vio afectada y tras ser censada por el Cuerpo de Bomberos del Distrito Capital su vivienda resultó declarada en alto riesgo, por lo que tuvo que ser trasladada junto a su familia al refugio ubicado en el Frente Francisco de Miranda, donde después de unas semanas le fue atorgada por el Gobierno Nacional una vivienda en la urbanización Betania II, en Ocumare del Tuy.

Con brillo en los ojos y conteniendo las lágrimas expresó que confía en Dios y que este cambio ha sido lo mejor para ella y sus hijos, aunque indica que debido a la situación en la que vivían se habían acostumbrado a estar en un lugar que representaba un peligro eminente.

Por su parte, Sandra Bravos, procedente del sector Santa Ana, parroquia Antímano, relató: “Como a las 7:00 de la noche comenzó la vaguada, esto se inundó todo, a las casas se les metió el agua y pudieron salvar poco de sus enseres, todo fue horrible, no hubo muertos, pero hubo muchas pérdidas materiales”.

Describe que durante la noche del 25 de septiembre se escuchaba un ruido horrible y se podía ver como la montaña se deslizaba y se caía, por ello los organismos de seguridad desalojaron a alrededor de 10 familias y luego el día siguiente fueron evacuadas todas las personas afectadas.

Sin explicación aún de aquello que vivió el pasado mes de septiembre, Bravo dijo que al parecer lo sucedido fue porque se unieron dos quebradas y eso ocasionó que todo se cayera.

Destacó que invadieron el lugar porque no tenían como pagar un alquiler, “yo tengo una niña especial y mensualmente el tratamiento es costoso y por eso decidimos invadir, sabíamos que había riesgo pero igual lo hicimos (…) En este lugar dejamos muchas cosas, dejamos a los vecinos con los que hemos hecho vida, nuestros amigos y actualmente muchos hemos sido adjudicados en diferentes sitios, ahora en este lugar lo que hay son solo escombros”.

Además, Bravo considera que gracias a su nueva vivienda tendrán un futuro mejor, ya que cuentan con un espacio más tranquilo y donde no tendrán que vivir con el temor de que el cerro se va a deslizar o que la casa se les va a caer encima.

El pueblo venezolano, y sobre todo el pueblo caraqueño, ha vivido en los últimos meses las arremetidas de la naturaleza, es por ello que cada uno de los afectados y afectadas se despiertan con una nueva vida y un nuevo camino.

Cabe destacar que luego del pasado mes de septiembre la ciudad capital fue azotada por las intensas lluvias producto del fenómeno “La Niña”, el cual dejó como resultado miles de personas damnificadas y sin viviendas.

Espacios inhabitables en el Valle caraqueño

A partir de los años 50 y 60, con el desarrollo de nuevas áreas industriales en los sectores de La Yaguara, Algodonal y en la vía Intercomunal de Antímano, se originaron centros urbanos con construcciones informales en áreas de alta susceptibilidad a los movimientos de masas.

Es por ello que las nuevas comunidades ocuparon tanto terrenos desestabilizados por antiguas explotaciones de roca caliza como sectores inestables debido a sus condiciones naturales.

Con la ocupación de estas cuencas altas de drenajes tributarios al Río Guaire y el incremento horizontal de estos espacios se han multiplicado los factores de riesgo ante los movimientos de masa, convirtiéndose en zonas de alta susceptibilidad por sus condiciones geológicas y por el incremento de caudales pico de crecientes al aumentar la superficie cubierta con casas sobre la superficie originalmente cubierta con vegetación.

Demolición de viviendas en alto riesgo

El jefe del área de Planificación de Riesgos y Desastre del Cuerpo de Bomberos del Distrito Capital, Marcos Rivera, explicó que algunas estructuras deben ser demolidas porque representan algún tipo de riesgo de colapso, desplazamiento, caída parcial de algunas de sus paredes o de las columnas.

En tal sentido, Rivera manifestó que cuando los terrenos son desplazados o han sufrido un proceso de socavamiento por las aguas que puedan corren alrededor de el, este queda debilitado, lo que amerita que la estructura deba ser desalojada y luego demolida para evitar cualquier tragedia para los y las habitantes que encuentran dentro de ella.

Debido a este tipo de riesgo que se puede evaluar luego que se determina la amenaza y la vulnerabilidad de la estructura, los organismos competentes proceden al proceso de demolición

Cabe destacar que las demoliciones deben ser revisadas por personal capacitado o cuadrillas de construcción bajo la supervisión del personal de la Corporación de los Servicios Municipales.

Construcción de Viviendas dignas

El Gobierno Bolivariano construirá en los próximos meses 13.120 viviendas en la ciudad capital, por medio del Gobierno del Distrito Capital, la Alcaldía del Municipio Libertador, el Ministerio del Poder Popular para el Hábitat y Vivienda y demás entes gubernamentales, a fin de garantizar hogares dignos para los refugiados y refugiadas.

Además, se puede destacar que el despacho del Gobierno del Distrito Capital dirigirá la construcción de unas 1.350 viviendas con una inversión de 250 millones de bolívares.

Estas viviendas serán edificadas en dos terrenos adquiridos por el Gobierno del Distrito Capital, uno en Macarao (1.200 viviendas) y otro en Bellas Artes (150). Además, se ejecuta la construcción de proyectos habitacionales en Los Lanos (San Bernardino), el barrio El 70 (El Valle) y Santa Eduviges (Coche).

A través de su cuenta en Twitter, la jefa de Gobierno del Distrito Capital, Jacqueline Faria, anunció que en el mes de marzo serán entregadas 68 viviendas de la primera etapa de Santa Eduviges.