Gracias a Google Earth se descubren en Perú unos geoglifos prehistóricos
02 abr, 2012 - En Perú se han encontrado geoglifos con efigies en forma de animales, algunos de más de 4.000 años de antigüedad, que se elevan en las llanuras costeras del Perú. Todo parece que el descubrimiento arqueológico de los geoglifos fue posible gracias a un programa de internet.
Montículos gigantes, de 5 a 400 metros de extensión, con forma de animales incluyendo un cóndor, una orca, un pato, un caimán o un puma fueron descubiertos por los investigadores del Departamento de Antropología de la Universidad de Missouri gracias a las imágenes proporcionadas por Google Earth.
En el sitio arqueológico Buena Vista del Período Inicial, ubicado en el Valle del Chillón, se realizaron durante años excavaciones. El proyecto está dirigido por Robert Benfer, antropólogo y profesor emérito de esta Universidad. "El hallazgo de montículos con efigies de animales en la zona de la costa cambia nuestra concepción de la prehistoria peruana temprana", dijo Benfer.
"Los más antiguos montículos gigantes peruanos"
El antropólogo de Missouri explicó que este tipo de geoglifos prehistóricos son comunes en Norteamérica, generalmente en el centro de EE. UU. y el norte de México. En Perú usualmente son montículos como estos (antes pirámides o centros ceremoniales) en los valles costeros, pero difieren de los encontrados en que suelen tener una estructura tridimensional acorde a su función.
"Algunos de ellos son de más de 4.000 años de antigüedad. Los más antiguos montículos peruanos se construyeron al mismo tiempo que las pirámides de Egipto", señaló el antropólogo.
Los recientes descubrimientos se ubican en el Valle de Chillón (en Lima), en los asentamientos preceramicos de El Paraíso (montículos con la figura de un cóndor, un caimán y un puma). Son construcciones rocosas en la cima de lo que parece ser una plataforma terrestre preparada. El otro descubrimiento se encuentra en el Valle de Casma (Áncash), en el enclave de El Olivar Bajo.
Los investigadores consideran que estos geoglifos podrían representar una especie de calendario, al encontrar orientaciones astronómicas en cada montículo gigante.
"Sacerdotes astrónomos podrían haber hecho la construcción dirigida de los montículos tras sus observaciones del cielo y servirían para realizar ofrendas a la tierra desde lo alto de las criaturas de barro", concluyó Benfer.
En el sitio arqueológico Buena Vista del Período Inicial, ubicado en el Valle del Chillón, se realizaron durante años excavaciones. El proyecto está dirigido por Robert Benfer, antropólogo y profesor emérito de esta Universidad. "El hallazgo de montículos con efigies de animales en la zona de la costa cambia nuestra concepción de la prehistoria peruana temprana", dijo Benfer.
"Los más antiguos montículos gigantes peruanos"
El antropólogo de Missouri explicó que este tipo de geoglifos prehistóricos son comunes en Norteamérica, generalmente en el centro de EE. UU. y el norte de México. En Perú usualmente son montículos como estos (antes pirámides o centros ceremoniales) en los valles costeros, pero difieren de los encontrados en que suelen tener una estructura tridimensional acorde a su función.
"Algunos de ellos son de más de 4.000 años de antigüedad. Los más antiguos montículos peruanos se construyeron al mismo tiempo que las pirámides de Egipto", señaló el antropólogo.
Los recientes descubrimientos se ubican en el Valle de Chillón (en Lima), en los asentamientos preceramicos de El Paraíso (montículos con la figura de un cóndor, un caimán y un puma). Son construcciones rocosas en la cima de lo que parece ser una plataforma terrestre preparada. El otro descubrimiento se encuentra en el Valle de Casma (Áncash), en el enclave de El Olivar Bajo.
Los investigadores consideran que estos geoglifos podrían representar una especie de calendario, al encontrar orientaciones astronómicas en cada montículo gigante.
"Sacerdotes astrónomos podrían haber hecho la construcción dirigida de los montículos tras sus observaciones del cielo y servirían para realizar ofrendas a la tierra desde lo alto de las criaturas de barro", concluyó Benfer.