Roma, junio 17 - El papa Francisco y el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, conversaron este lunes sobre algunos de los retos que actualmente enfrenta la nación suramericana, especialmente aquellos vinculados a la disminución del índice de pobreza y la lucha contra flagelos como la criminalidad y el narcotráfico.
La oficina de prensa de la Santa Sede reseño que el Sumo Pontífice recibió en su despacho, en el Palacio Episcopal de la Ciudad del Vaticano, al Dignatario venezolano, quien se encuentra en Italia en el marco de una gira de trabajo que realiza por el continente europeo.
De acuerdo con el comunicado del Vaticano, la reunión duro alrededor de 20 minutos y se desarrolló en un "clima de cordialidad". Ambos líderes también repasaron "la situación social y política de Venezuela", después de los recientes incidentes violentos promovidos por la derecha en el país suramericano.
Durante el encuentro, Francisco hizo referencia a la presencia histórica de la Iglesia Católica en Venezuela, y "a su decisiva aportación en los ámbitos de la caridad, la asistencia sanitaria y la educación".
Igualmente, se concordó "en la necesidad de un diálogo sincero y constante entre la Conferencia Episcopal venezolana y el Estado, para el desarrollo de toda la nación".
Maduro aprovechó la ocasión para explicar al Papa cómo recogió el premio otorgado por la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO, por su sigla en inglés), por haber reducido el hambre en Venezuela en el último decenio.
La entronización del argentino Jorge Mario Bergoglio como Santo Padre fue siempre bien valorada por Maduro, quien incluso recibió con beneplácito las bendiciones que enviara su Santidad, a propósito de los convulsos días que se vivieron en Venezuela tras los recientes comicios presidenciales.
El Mandatario venezolano no pudo asistir a la misa de comienzo de pontificado de Francisco, celebrada el pasado 19 de marzo, y ésta es, por tanto, la primera visita oficial que realiza al Sumo Pontífice de la Iglesia Católica.
El líder venezolano obsequió a Francisco un ejemplar de la Constitución Bolivariana, un retrato de Simon Bolívar, un cuadro de la Virgen de Coromoto -patrona de Venezuela- y una escultura del doctor José Gregorio Hernández (1864-1919), quien se encuentra en proceso de canonización.
Maduro arribó a Roma el día domingo y acudió a la 38 Asamblea de la FAO, para recibir un premio en reconocimiento de la política alimentaria de Venezuela. Durante el evento, llamó a una alianza energética “para los próximos 100 años” entre su país e Italia.
La agenda del Presidente prevé que después de la audiencia con Francisco, Maduro mantendrá también un encuentro de trabajo con su homólogo italiano, Giorgio Napolitano, y conversará con dirigentes de movimientos sociales, políticos y juveniles.
La oficina de prensa de la Santa Sede reseño que el Sumo Pontífice recibió en su despacho, en el Palacio Episcopal de la Ciudad del Vaticano, al Dignatario venezolano, quien se encuentra en Italia en el marco de una gira de trabajo que realiza por el continente europeo.
De acuerdo con el comunicado del Vaticano, la reunión duro alrededor de 20 minutos y se desarrolló en un "clima de cordialidad". Ambos líderes también repasaron "la situación social y política de Venezuela", después de los recientes incidentes violentos promovidos por la derecha en el país suramericano.
Durante el encuentro, Francisco hizo referencia a la presencia histórica de la Iglesia Católica en Venezuela, y "a su decisiva aportación en los ámbitos de la caridad, la asistencia sanitaria y la educación".
Igualmente, se concordó "en la necesidad de un diálogo sincero y constante entre la Conferencia Episcopal venezolana y el Estado, para el desarrollo de toda la nación".
Maduro aprovechó la ocasión para explicar al Papa cómo recogió el premio otorgado por la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO, por su sigla en inglés), por haber reducido el hambre en Venezuela en el último decenio.
La entronización del argentino Jorge Mario Bergoglio como Santo Padre fue siempre bien valorada por Maduro, quien incluso recibió con beneplácito las bendiciones que enviara su Santidad, a propósito de los convulsos días que se vivieron en Venezuela tras los recientes comicios presidenciales.
El Mandatario venezolano no pudo asistir a la misa de comienzo de pontificado de Francisco, celebrada el pasado 19 de marzo, y ésta es, por tanto, la primera visita oficial que realiza al Sumo Pontífice de la Iglesia Católica.
El líder venezolano obsequió a Francisco un ejemplar de la Constitución Bolivariana, un retrato de Simon Bolívar, un cuadro de la Virgen de Coromoto -patrona de Venezuela- y una escultura del doctor José Gregorio Hernández (1864-1919), quien se encuentra en proceso de canonización.
Maduro arribó a Roma el día domingo y acudió a la 38 Asamblea de la FAO, para recibir un premio en reconocimiento de la política alimentaria de Venezuela. Durante el evento, llamó a una alianza energética “para los próximos 100 años” entre su país e Italia.
La agenda del Presidente prevé que después de la audiencia con Francisco, Maduro mantendrá también un encuentro de trabajo con su homólogo italiano, Giorgio Napolitano, y conversará con dirigentes de movimientos sociales, políticos y juveniles.